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El oasis de Huacachina

Cuando pensamos en un oasis, la imagen de una laguna de agua dulce, rodeada de palmeras, en mitad del desierto acude a nuestra mente. Cuesta creer, que una imagen tan idílica pueda existir  ¿Verdad? Pues a 5km de la ciudad peruana de Ica, encontramos la laguna de Huacachina, un oasis en medio del desierto costero del Pacífico.

Fue un exclusivo balneario en los años 60 y a su alrededor se construyeron casa y hoteles, además de la carretera que conecta con la ciudad. Rodeado de arenas blancas y con unas aguas de color turquesa mantiene ese aire paradisiaco de antaño, sin embargo, el paso del tiempo y la falta de mantenimiento, nos ofrecen hoy día un aspecto de abandono en el que queda patente que “tiempos pasados fueron mejores”.

Aún así, es más que recomendable dejarse caer por aquí, ya sea para dar un paseo por las dunas, dar una vuelta en barca por el lago, hacer sandboarding… Eso si, mejor hacedlo prontito, pues más allá del calor del desierto, que creedme sufriréis, es tal la cantidad de gente que acude a pasar el día que la experiencia se pierde un poco.

Llegar es muy sencillo, desde el propio centro de la ciudad de Ica podéis coger un tuk tuk (también llamado moto taxi) por unos 5 soles el trayecto. Además de la aventura que supone subir a uno de estos transportes, la primera visión del oasis cuando lleguéis por carretera, os dejará boquiabiertos.

A tener en cuenta...

Laguna de Huacachina

Tuk Tuk desde el centro de la ciudad de Ica

Precio Tuk Tuk
5 soles por trayecto

Se recomienda ir a primera hora de la mañana para evitar aglomeraciones